El mundo
corre en todas direcciones
para ganarse el pan.
Símbolo universal
de lo que se puede compartir.
de lo que se puede compartir.
Todos
tenemos hambre de pan,
pero de mucho más aún.
Hay hombres
que están dispuestos a cualquier cosa
por un mendrugo de pan.
En ciertas prisiones,
una miga de pan
valía su peso en oro.
Tirado a veces a la basura,
escandaliza los ojos demasiado grandes
de pequeños niños hambrientos.
No sirve de nada atesorarlo en el granero,
porque mañana se pudrirá u otro lo cogerá.
Pan que manos de tantas mujeres
han trenzado a lo largo de los siglos.
Pan que por todo el mundo,
como una cadena invisible,
ha amasado la humanidad.
No hay comentarios
Publicar un comentario